Quizá sea el lugar donde aún se conserva lo más tradicional del estilo de casa de té de la zona. En lo que a la carta de té (completa y por ende variada, no deja afuera ni tipos de té, ni opciones de blends) y pastelería tradicional alemana y centroeuropea, con buena relación precio, calidad y cantidad (a mi opinión las porciones de torta no son para compartir, aceptan tarjetas, solo se llega caminando) buena atención, personal atento y amable. En una ubicación de cuento, que incluye cruzar un puentecito de madera bastante precario, rápidamente me olvidé de los 900 […]