La Sagra (aquí y allá)

BárbaraTotal agradece a Liliana Giannico por la colaboración para esta nota.

¿Quién dijo que los domingos son solo de fideos?  Ayer fuimos todos de porchetta.  Estuve en la Asociación Italiana Raíces Abruzzesas Argentina en la SAGRA DEL VINO CRENAI

“En tantos días que llevo en Italia comí una sola vez pizza es que toda mi atención se la he dado a la porchetta.  La primera la comí en Frascati con vino frascatano.  La segunda la comí en Assisi cuando el día me pidió un atajo a la sombra, es que de tanto rezo pedí comer algo inmoral y lo fue.  Otra más comía atravesando el Ponte Vecchio en Florencia, de tanto arte no vive el hombre, pero si la cocina así lo fuera estaba en el lugar que reivindicaba la teoría…Comí porchetta en Roma, en la playa en Fregene y en Tívoli también.  Y si me lo piden el mapa haré.  Puedo ubicar la memoria para traer el recuerdo.  No puedo explicarlo y sólo sé que de tan simple que es, no se parece a nada”  Julio 2017

La porchetta es una comida típica de la cocina del centro de Italia.  Es un cerdo que se deshuesa y se rellena con su propia carne, tocino, hierbas (las que nunca faltan: romero, ajo, hinojo y según la zona otras hierbas que abunden) se cierra con su propio cuero y se cocina al horno con leña.  Se come al plato o como un panino con pizza bianca (pan de pizza sin salsa de tomate)  desde hace unos años es Prodotto agroalimentare tradizionale.  (aunque ud. lo vea como una comida grasosa sepa que el proceso de cocción hace que las grasas se disuelvan con el calor y lo hagan un plato sabroso y bastante más liviano de lo que imagina)

  

 

 

 

 

 

 

La Porchetta que hizo Vittorio fue la invitada especial.  Hacíamos la fila con el plato hasta la balanza y él iba pesando.  Mientras esperaba y no desesperaba (porque la veía grande, alcanzaba para todos) Vittorio me contó que la había hecho el jueves (abrirla, preparar el relleno…rellenar y volver a cerrar) parece una recitado pero llevó horas, no tantas como las doce horas de cocción en el horno que me llevó a conocer, allí al fondo junto a la parrilla en la sede de la asociación.

El final del almuerzo vino acompañado de la sagra del vino, mermelada, licores y berenjenas.  Votamos y esperamos las definiciones.

 

 

 

 

 

 

“Llevo días en Sorrento y el dialecto que hablan me cuesta un poco más que otros dialectos.  Parece que días antes que llegue yo hubo una sagra…no traje el diccionario y no puedo asociar la palabra con nada…pero en la calle veo unos mosaicos, en la otra calle veo un mural y entro a un jardín público de limones…por suerte un sorrentino terminó por contarme que días antes fue la sagra del limón la más importante para ellos, para la ciudad, para la zona…que si hubiera estado…hubiera entendido lo que es algo tremendo.  Desde ese día, cuando hablo por teléfono con mi mamá y le cuento mis días en la costa Amalfitana empezando por Sorrento le digo: mamma no te puedo decir lo bello que es Sorrento: es tremendo!” Junio 2017

Para cuando caía la tarde yo volvía desde San Isidro  por la autopista con la barriga llena de nostalgia…este había sido, definitivamente, mi primer acercamiento a la italianitá desde que volví de Italia así tan fuerte, tan representativo y tan real.  Y si lo olvido recordarme que alguna vez, estuve ahí.

#YoSoyBárbaraTotal

 

 

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