Aprendí de mi padre que había un sabor diferente de empanadas, que no era nuevo, pero que era tan pero tan novedoso que no me lo podía decir. Que sólo los años y el andar de cocina en cocina afinaban el paladar y que yo iba a descubrirlo por las mías…como quien cerca de la mayoría de edad empieza a tomar vino y a afinar la copa…lo mismo pasa con el morfi.
Todas las noches era tema de la cena familiar saber qué había almorzado mi padre en el comedor de su trabajo. Aprendí tanto todos esos años, es más sé que mi vocación ligada a la cocina y al escribir viene tanto de esas anécdotas que compartí con mi papá…porque llevo más de treinta años hablando de comida con él…
Algunas veces…casi seguro los viernes, había de primer plato, de entrada: empanadas de YaTeVí
Lo decía todo junto, rápido, como si fuera un recitado…
Quizá como por sostener la magia, la incertidumbre…y hasta incentivarnos a la curiosidad…es que mi hermano y yo no preguntábamos que sabor era ese…
Mi papá trabajó muchos años en ese lugar y siempre tuvo comedor al medio día para los empleados, el hecho de que me los contara todos los días, fue sin darnos cuenta como también fui aprendiendo de criterio, supe que en invierno siempre iba a ir bien arrancar con sopa y en verano con ensaladas y fiambre, que el arroz frío con mayonesa, atún y aceitunas moldeado, la carne fría cortada finita y los tomates rellenos aparte de llenar, eran comida variada…aprendí de mi padre que la variedad también era buena para el paladar, para no acostumbrarlo a un solo sabor, para ampliar también…quién si no puede decir que NO le gustan los ravioles de sesos: aquel que los comió, no una sino varias veces, con diferentes salsas…
Pero los viernes, los viernes había pizza y era fija que entonces iba a haber empanadas primero. Pues que las había, a veces de carne, de cebolla y las mejores de jamón y mozzarella…pero otras veces estaban las de YaTeVí
Es que en el comedor para personal nada se tira, todo se regenera y si ayer hubo pollo con papa y batata…seguramente lo que sobró estaba en las empanadas, si ayer hubo ternerita guisada con arroz…¿a que no sabes de que son las empandas hoy?
Hoy podría ser aplaudido como innovación y creatividad las empanadas de choclo, papa y cebolla…algún crítico gastronómico resignificaría el sabor y yo te diría que ayer el plato del día fue carbonada criolla, que lo que sobró se pico y hoy está siendo relleno de empanada.
Si alguna vez te pasa del lado de adentro de la cocina, dirás que supiste aprovechar y regenerar las sobras…si sos el que la compra, el que pasa y ve un sabor diferente…sabrás que algunos sabores son ya vistos…días antes como sugerencia del día.
#YoSoyBárbaraTotal