A unas cuadras del centro del pueblo, siguiendo el camino, que nos lleva entre subidas y bajadas pronunciadas (más subidas que bajadas) llego en este invierno que apura algunas horas y la tarde se embellece aún más, en esta mesa con vista a las sierras y el sol regala por demás.

En un ambiente con todos los detalles para sentirse distinto entre tanta tradición alemana, llegué a esta posta del camino del té, con espíritu (pastelería y té) estilo armenio.

Su personal atento y amable explica cómo es el servicio (té negro en hebras preparado espera en una tetera lista, sobre agua a la temperatura justa.
Es opción del comensal las proporciones en su taza (te podes servir todas las veces que quieras) lo que a la pastelería se refiere, hay opciones para elegir el servicio para dos personas (que incluye también degustación de pastelería) o elegir a gusto de la carta (deditos de novia, baklava, tortas típicas armenias, gurabie, etc.) .

Consultar días y horarios varían según la temporada (también es restaurante y ofrece comprar para llevar por la noche)

Aunque no es necesario reservar, mi sugerencia es que en tus planes, sí o sí esté este lugar para ir si vas a Villa General Belgrano, resérvatelo vos…

Bárbara

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