Azul hace las mbejú a ojo. Cada vez que le pido la receta para probar me dice: -Mirame, vas a ver que le pongo un poco de fécula de mandioca, algo de aceite y quesito – Yo miré ese “algo” de cada ingrediente y le tiré por la cabeza mi propio libro “Recetas para Ser contadas” donde describo, casi que es una oda, una apología a que las recetas por más que las hagamos con jarrita medidora, balanza y anotaciones nunca salen dos veces iguales. Y sobre todo, que muchas veces hasta que sale bien, unas migas quemadas de una […]