Si de cocinar y comer se trata, que juntos y separados van los caminos de quien sabe comer y cocinar, así será como dice la frase “cuando conoces el truco ya no hay más magia” eso para los magos, para Ud. y yo, mi Estimado/a Lector/a vaya este salmón ahumado en madera especiada con papines al romero.  Famoso plato que se sirve en varios restaurantes…pero el de la foto lo comí en una casa hecho por manos amigas: en casa como de restaurante

¿Cuántas veces estabas comiendo en un restaurante y al probar el primer bocado recordaste y rápidamente comparaste con la comida de tu casa? para bien.

¿Cuántas veces leímos en la carta del restaurante? flan casero, pasta hecha mano tiramisú della nonna y siguen los ejemplos.  Esa comida te hacía acordar a “como en casa”

¿Y al revés?

Cuántas veces estabas comiendo en una casa de invitado y sentiste que estabas comiendo “como en un restaurante”

Me pasa con las milanesas: no me gustan las de restaurante.

Me pasa con las pizzas: me gustan las de las pizzerías.

En ambos casos elijo una y otra opción. Dice el diccionario que: una paradoja es emplear expresiones que aparentemente envuelven contradicción.

Hace muchos años, pasé meses haciendo medias lunas, probando recetas, viendo videos, etc.  Nunca jamás me salieron lo suficientemente bien como para dejar de comprar en la confitería, sin embargo y pese a que es una técnica más compleja hace 3 veranos mejoré bastante mi producción de helados.

Hace unos años conocía un restaurante que se llamaba “Como en casa” y tantas otras veces comí en casas donde toda la conversación se resumía en que “se comía mejor que en un restaurante”

Bárbara

Leo sus “como en casa” y “de restaurante”